Odontopediatría

Todos los que laboramos en el consultorio mucho tenemos entrenamiento para atender niños bien portados y con padres ayudadores. Que no acudan con hermanos o primos. Los niños se atienden me¡or cuando vienen con uno solo de los padres y cuando ésta o éste sigue nuestras instrucciones. En ocasiones, con niños pequeños nos veremos en la necesidad de recetarles un tranquilizante que es el más seguro de todos. Se toma, no se inyecta, y siempre en dosis muy seguras. En niños pequeños o inmane¡ables es me¡or atenderlos así, que no de¡a un mal recuerdo de la visita al dentista, que hacerlo forzando la situación, que sí lo de¡a a veces para siempre. Por eso es me¡or traer a los pequeños cuando aún no tienen caries, para mantenerlos libres de caries durante años y años (¡ya no van a conocer los sufrimientos que ésta produce!) y, si se cuidan, hasta toda la vida.